Pesca 5 de Junio del 2010
En esta salida de pesca no se pillo gran cosa ya que el agua estaba muy turbia y había termo clima en el fondo por lo que no se veía nada de vida por ningún lado, tras varias horas pescando en poca agua y no haber pillado nada, fuimos a mas agua para ver si allí se veía algo mas de movimiento pero tras varias bajadas vimos que no era así, y que no seria un gran día de pesca.
Así que no tiramos la toalla al ser aun muy temprano y seguimos buscando esta vez con mas razón en todos los agujeros que veíamos, intentando dar con algún mero que nos salvara la salida de pesca ya que ir desde Sevilla al Estrecho y no pillar ningún pescado para la cena, era algo que no había pasado antes y que quería que no fuera la primera vez que pasara,jejej.
Aunque en ese punto del día ya tenia frío y estaba cansado por no estar muy en forma, en vez de dejar el día por perdido fuimos de nuevo a menos agua para al menos pescar mas a gusto y intentar calentarnos un poco asiendo mas bajadas en menos tiempo, moviendonos mas para entrar en calor.
En una de las bajadas mi compañero Jose vio una cola en una gran loza y nos ponemos manos a la obra para intentar capturarlo y así poder sacar una buena pieza al menos en esta salida de pesca, nos fuimos turnando para así intentar capturarlo antes de que saltara la corriente de bajamar que es la mas fuerte y si entrara antes de pillarlo lo tendríamos que dejar al estar ya cansados.
La verdad es que el mero estaba en una postura un poco complicada, pero desde un pequeño agujero se le veía la cabeza por lo que decidimos dispararle con la varilla sin muerte por hay y una vez muerto sacarlo por el agujero mas grande que aunque estaba de cola, al estar muerto no daría muchos problemas para sacarlo. Aunque una cosa es la teoría y otra la practica, esta vez salió todo bien y en 4 bajadas el mero estaba fuera. Peso 8,400kg.
Seguimos pescando y en una de las bajadas localizo un mero el cual esta en una loza grande y que solo se ve por un agujero que esta en la parte alta de la loza y que hay que bajar por ese agujero y mirar en esa postura así que pescamos en pareja uno arriba y el otro abajo, pendientes uno del otro en cada momento ya que no era fácil entrar y salir de la piedra ni la postura en la que había que estar para poder ver al mero. La cosa es que en una de mis subidas al salir marcha atrás del agujero, se me quedo pillado uno de mis gemelos dandome un dolor increíble y por el cual no podía mover esa pierna del dolor y la contractura muscular que tenia, gracias a que llevo muy poco plomo en el cinturón me impulse con la otra pierna y fui ascendiendo poco a poco por la flotabilidad del traje y impulsando con una sola pierna, cogí y solté el fusil para poder impulsarme también con las manos y en ese momento note las manos de mi compañero Jose que me agarro por la cintura y me llevo hasta la superficie rápidamente, dando la salida de pesca por concluida.
La verdad es que en los 25 años que llevo pescando nunca, repito nunca había tenido un susto como ese, ni me había sentido tan poca cosa hay abajo viendo que se me gastaba el oxigeno y que no podía mover una de mis piernas, seguramente fue por el cansancio y por la falta de entrenamiento ya que no hago nada de deporte y solo practico la pesca submarina a pulmón y muy de vez en cuando.
Después del susto del gemelo me dio por pensar en las miles de cosas que pueden sucedernos bajo el agua y la verdad es que desde entonces intento ser mucho mas precavido si cabe, hago estiramientos antes de cada salida cosa que no hacia antes…
Un saludo y hasta la próxima salida de pesca.