Mero o Epinephelus
El Mero o Epinephelus, pertenece a la familia de los Serránidos y posee un cuerpo ovalado y aplanado en los laterales, con la parte de la cabeza y boca mas voluminosos que el resto, en algunos países la especie de meros pueden alcanzar los 3m de largos y 300 kilos de peso, pero en España las capturas mas grandes no sobrepasan los 50 kilos de peso.
Las tonalidades de su piel son muy variadas , predominando los colores marrones con su vientre de tono mas amarillento y las aletas dorsales mas anaranjadas, con pintas de colores entre amarillos y blancos.
El mero es uno de los animales denominados como hermafrodita proterogínico, ya que suelen nacer hembras y ante la muerte de un gran macho o ante la ausencia de estos, se pueden transformar su sexo convirtiendose en macho al llegar a la madurez sexual.
– Hábitat y costumbres.
En España sobre todo en el Sur, se pueden encontrar en zonas costeras de aguas cálidas y con litoral rocoso y se pueden ver ejemplares de meros desde los 6-7 metros de profundidad según la zona de pesca siendo la cota normal para poder verlos la que va desde los 15 metros en adelante y siempre en zonas rocosas ,viviendo conjuntamente con otras especies como los Ojancos, Borriquetes, Brotolas, Congrios, Bogabantes, Corbas, Sargos breados, por lo que podremos tener mas posibilidades si buscamos piedras en las que hayan estas especies o se encuentren cerca, suele ser una especie muy territorial y solitaria se pueden ver algunas piedras y zonas reducidas con varios ejemplares de meros de buen tamaño, sobre todo en la primavera y verano que es cuando corresponde su ciclo reproductivo.
Vive en cuevas y grutas de fondos rocosos que suelen tener unas características determinadas y siempre repetitivas, no vale cualquier cueva ni cualquier zona para que un mero decida quedarse en ellas, aunque puede ser que nos topemos con algún buen mero desplazandose entre las piedras, incluso capturarlos en alguna piedra muy simple y siendo fácil su captura, pero seguro que esa no es su piedra o guarida habitual, si no una piedra cercana en la cual se ha metido ante un peligro o mientras va de caza siendo mucho mas fácil su captura.
Las autenticas piedras de meros suelen tener varias entradas sin visibilidad entre ellas para poder escapar al sentirse amenazado o atacado, suelen tener un punto muerto en su interior donde por mas que miremos o busquemos por todas las entradas posibles, no lo veremos, sintiendose seguro en esa zona y no saliendo de la misma hasta estar seguro de que la amenaza ha desaparecido.
La alimentación del mero es variada aunque sobre todo come cefalópodos y crustáceos los cueles traga o succiona enteros o aplasta a la fuerza de sus mandíbulas, debido a su tamaño necesita abundantes presas para saciarse, convirtiendose al crecer en un depredador insaciable.
– Propiedades nutritivas y de salud.
Debido a las características de su carne , se considera un alimento semigraso, ya que no supera los 6 gramos de grasa en una porción de 100 gramos.
Entre las vitaminas que aporta al organismo destacan las del grupo B que permiten aumentar el rendimiento de los nutrientes energéticos, formación de glóbulos rojos y fortalecimiento del sistema nervioso. Los minerales potasio, magnesio y fósforo presentes en el mero, regulan el sistema nervioso, actividad muscular y obtención de energía.
